Prematuro

En otros países donde la Osteopatía lleva más tiempo y es conocida por la mayoría de la población, se considera imprescindible la intervención de un Osteópata en los prematuros lo más tempranamente posible.

Durante la gestación se sabe que el feto sufre una serie de torsiones y compresiones externas que lo pueden llegar incluso a deformar, sobre todo su cabecita. Si estas presiones externas recibidas han sido más fuertes que la resistencia de la cabecita del bebé, provocará alteraciones en su forma, función y desarrollo.

En la mayoría de los casos la total recuperación, sin tratamiento osteopático, no es posible.

Los prematuros son particularmente susceptibles debido a su inmadurez, su cabecita es más frágil y tiene menor resistencia a estos fenómenos compresivos.

Después del nacimiento la cabecita del bebe puede seguir sufriendo compresiones externas debido principalmente a dejar siempre a los neonatos en las misma posición.

En lo prematuros esto sucede con mayor frecuencia y gravedad ya que en las UCI Neonatales necesitan colocarlos de lado para facilitar el acceso al instrumental médico.

Por eso se recomienda ir cambiando la posición del prematuro en la medida de lo posible.

Esa posición va a determinar una deformidad craneal típica llamada ESCAFOCEFALIA que se caracteriza por tener una forma alargada y estrecha.

Estudios científicos referentes a estos casos concluyen que:

–       El 48% de los recién nacidos presentan algún tipo de deformidad craneal.

–       El 18% de los casos de deformidad, presentarán en el futuro retraso psicomotor y dificultad en el aprendizaje.

No se han realizado todavía estudios específicos en prematuros pero se sospecha que estos porcentajes deben ser todavía más elevados.

Desde la Osteopatía se recomienda consultar con un profesional bien formado (Eur Ost DO) y experimentado lo más tempranamente posible para corregir las alteraciones funcionales.